Una regla muy conocida en el ámbito de la independencia es que a través de las conexiones y contactos se dinamiza todo el ecosistema emprendedor, que incluye no sólo conocimientos sino que también la posibilidad de asociaciones, venta de empresas y hasta financiamiento.
La capacidad de conectarse con la gente es un rasgo común y casi una obligación entre los emprendedores de éxito que buscan la ansiada libertad económica, entre otras cosas.
Si bien para las personas introvertidas puede ser natural conectarse en un grupo pequeño y conocido, el verdadero desafío para alcanzar el éxito está en los grandes eventos o reuniones ya que exige entablar una ronda de relaciones interpersonales. 
No superar esta barrera psicológica puede ser perjudicial a la hora ampliar la red de contactos y hacer crecer el emprendimiento o materializar las ideas.
Hoy en día la importancia del networking es clave al hacer negocios. Cada persona que se conoce puede transformarse en la oportunidad esperada para expandirse o la solución inesperada a un problema sin solución.
Aquí van cuatros tips para ayudar a emprendedores que no consiguen dar ese paso decisivo en reuniones sociales con desconocidos.
1. Llegar temprano. Muchas veces, al llegar a una reunión o evento, el lugar está lleno de gente que ya está agrupada y conversando animadamente. Esto puede ser una situación intimidante o abrumadora. Cómo entrar en alguno de esos grupos, es lo que una persona introvertida siempre se pregunta y, generalmente, termina aislado, a un costado para retirarse temprano y sin ningún contacto.
El consejo es llegar de 15 a 20 minutos antes o ser extremadamente puntual. Esto ayuda a sentirse cómodo mientras haya pocas personas en el lugar y facilita la instancia para presentarse y generar conversaciones de 1 a 1, o de a pocos, para entrar en confianza.
2. Lenguaje corporal. No pasar por alto el impacto del lenguaje corporal y la expresión facial. Hay momentos en estas reuniones donde, desanimados o vergonzosos, un emprendedor termina caminando solo, con las manos en los bolsillos o con una bebida. Lo mejor es estar consciente de la imagen que se proyecta a los demás. Es recomendable mantener una sonrisa y evitar cruzar los brazos.
3. Aprovechar las esperas. Cuando se está en una fila, un buen tip es mirar atrás y entablar una conversación con esa persona. Un simple «hola» da pie para entablar un intercambio de palabras, así como preguntar sobre el evento o a qué compañía pertenece. Lo bueno de estar en una fila es que se está obligado a estar cerca, al menos, de dos personas. Por lo tanto, aprovechar esa instancia es una excelente oportunidad mientras se espera el turno.
4. Seguir en contacto. Siempre es recomendable llevar varias tarjetas de presentación a los eventos e intercambiar datos de contacto con la mayor cantidad de gente. Es importante mantener una base de datos actualizada de los contactos profesionales, así como escribirles uno o dos días después del evento para saludarlos e invitarlos a agendar un próximo encuentro. Este simple esfuerzo fortalece la conexión con ellos y, lo más probable, es que vuelvan a reunir en futuros eventos o reuniones masivas.
(*) El autor de esta columna es director internacional del portal freelancer.com
