Libro “Canción de cuna de Auschwitz” la olvidada masacre nazi a los gitanos

Cuando se habla de las masacres y atrocidades que cometieron los nazis siempre se asocia con un solo pueblo. La verdad es que son cientos de miles los afectados de distintos orígenes, pero uno de los más olvidados o ignorados por la historia son los roma o gitanos.

Siempre por razones raciales, los nazis aplican las mismas prácticas de exterminio y “experimentación científica” con todos los que consideran inferiores en cualquier sentido.

Si bien los gitanos nunca son bien recibidos ni mirados en Europa, desde que llegan los nazis al poder comienza su holocausto. Decenas de miles mueren en los territorios orientales ocupados, mientras que otros cientos de miles son repartidos entre los distintos campos de concentración, entre ellos el tristemente famoso Auschwitz Birkenau (exclusivo para gitanos), además de Chelmno, Belzec, Sobibor, y Treblinka.

Sin bien no hay cifras unanimes en cuanto a la cantidad de gitanos exterminados, algunos historiadores aseguran que eliminaron al 50% de la población que habitaba Europa, mientras que otros hablan de varios millones.

Editado en Chile por Catalonia, el libro “Canción de cuna de Auschwitz”, del historiador bestseller Mario Escobar, rescata de ese olvido el relato conmovedor de una madre y sus hijos que luchan por sobrevivir en uno de los mayores campos de exterminio. 

Basada en la historia real de Helene Hanneman, el autor reconstruye la vida de esta enfermera y madre alemana que no duda en acompañar a su familia a un futuro tenebrosamente desconocido en manos de las SS, aunque su condición de alemana le otorgaba la libertad de continuar con su vida.

Desde el arresto de su esposo y sus cinco hijos gitanos, hasta el traslado de toda la familia al campo de concentración al sur de Polonia, el autor presenta a una Helene valerosa y determinada a sobrevivir con sus hijos a las terribles condiciones del campamento gitano de Auschwitz Birkenau.

Canción de cuna de Auschwitz cautiva el corazón del lector al retratar la vida cotidiana de los internos en el sector BIIe del también llamado Auschwitz II.

Son personas reales, prisioneras de distintos orígenes, en su lucha diaria por sobrevivir en uno de los más terribles campos nazis, así como las infames guardianas que las vigilaban y los encumbrados oficiales alemanes que gestaron una de las mayores barbaries en la historia de la humanidad.