Más de 250 personas estuvieron presentes en el lanzamiento del libro “Por las Grandes Alamedas”, efectuado el miércoles 20 de junio en el Salón de Honor del Senado, en el ex Congreso Nacional.
La publicación recoge el pensamiento y trayectoria de Aníbal Palma Fourcade, ex ministro de Educación del presidente Salvador Allende. En la oportunidad participaron el rector de la Universidad Tecnológica Metropolitana (Utem), Luis Pinto, ya que el libro se edita bajo el sello de esa casa de estudios, y el ex presidente de la República, Ricardo Lagos, quien comentó la publicación.
En su intervención, el rector de la casa de estudios destacó los aportes del político y abogado en la historia social de Chile. Dijo que “es importante no perder la memoria de aquellos sucesos y personajes que lograron construir y recuperar la democracia. Este acto es como un sueño hecho realidad, porque nos permite homenajear por medio de un gran trabajo a alguien que ha dedicado su vida al servicio público: Aníbal Palma”.
Agregó: “Nuestra labor editorial como universidad del Estado es, precisamente, expresión de aquella recuperación. Tenemos un rol ineludible en apoyar el proyecto país; en aportar al desarrollo nacional y de las regiones; en fomentar la creación y la generación de conocimiento de avanzada; y en promover la formación de profesionales de alto nivel, que a la vez sean ciudadanos comprometidos con su Patria”.
Por su parte, el ex mandatario Ricardo Lagos destacó la labor de Palma, la que situó «más allá del gobierno de la Unidad Popular», incluyendo «una brillante carrera de abogado y una intachable personalidad».
Lagos enfatizó que el libro es una «gran revisión de la historia social de Chile» a través de experiencias que Aníbal Palma vivió. «Es un trabajo que rescata -por ejemplo- el discurso de un ministro que renuncia a su cargo por el bien del país, de recuperar también su mirada de Chile desde el exilio y desde el duro proceso de resistencia a la dictadura, de recoger su papel en la lucha por recuperar la democracia, en la que participó activamente buscando consensos, demostrando siempre conciencia, consecuencia, lealtad y transparencia, para hacer de la actividad política algo noble”, dijo.
Por su parte, Aníbal Palma agradeció a la universidad, al autor del texto -el periodista Víctor Osorio- y a todos quienes asistieron al evento, enfatizando sentirse “muy emocionado por esta recopilación de entrevistas, discursos, fotografías y pasajes personales de mi vida, porque me recuerdan una muy linda época, en donde siempre intentamos soñar con un Chile justo, participativo y dedicado a mejorar la calidad de las personas de forma digna”.
“Por las Grandes Alamedas” forma parte del catálogo confeccionado por Editorial Utem, la que -bajo el alero de la vicerrectoría de Vinculación con el Medio de la universidad- se esfuerza en fomentar la cultura y estrechar los lazos con la sociedad chilena.
** Algunos párrafos marcados de la presentación hecha por el autor del libro, el periodista Víctor Osorio:
En unos días se conmemora el Natalicio N° 110 del chileno más notable del Bicentenario: Salvador Allende. Por otra parte, en unos meses habrán transcurrido 45 años del Golpe de Estado que derrocó por la fuerza el Gobierno que presidía por mandato constitucional de la ciudadanía. Ya ha transcurrido casi medio siglo desde esa mañana del 11 de septiembre de 1973, cuando el presidente tomó la decisión de defender hasta el final la libertad y la democracia, en circunstancias que bien describió el trovador Pablo Milanés: “Qué soledad tan sola te inundaba en el momento en que tus personales amigos de la vida y de la muerte te rodeaban” (…)
Aníbal Palma fue uno de los ministros de Estado más emblemáticos del presidente Allende y esa mañana del 11 de septiembre llegó a La Moneda para acompañar al mandatario, lo escuchó conmovido cuando pronunció, conectado por teléfono con Radio Magallanes, su último discurso: ese que hablaba de las “Grandes Alamedas”. Cuando concluyó sus últimas palabras, Allende saludó a cada uno de los presentes. Y le dijo entonces a Palma: “Yo sabía que usted iba a estar”. (…)
Tuvimos la oportunidad de conocer la figura de Aníbal Palma en los 80, en tiempos en los que la historia me asignó la responsabilidad de participar en la conducción del movimiento estudiantil secundario. En coherencia con las palabras que el ex ministro Osvaldo Puccio dedicó a este libro, sabíamos en esos años que no éramos el inicio de todo y conocíamos la importancia del conocimiento de la historia que nos antecedió. Por eso, la personalidad del ministro de Educación del presidente Allende fue un referente significativo a conocer para los adolescentes que en esos días se comprometían con la lucha por la democracia.
Me parece pertinente presentar dos ejemplos notables de los textos que se encontrarán en el libro que hoy presentamos. (…)
En una intervención en Costa Rica el 14 de octubre de 1998, Palma indicó que en tiempos del gobierno de la UP, “en la enseñanza media, los estudiantes elegían libremente sus centros de alumnos y a partir de la dictación del Decreto de Democratización de la Enseñanza, el que me correspondió implementar como ministro, los presidentes podían participar en las reuniones de los Consejos de Profesores y de los Centros de Padres y Apoderados. Las diversas federaciones estudiantiles tenían acceso directo al ministerio para plantear sus puntos de vista, algunos discrepantes de las políticas de gobierno, pero a todos se escuchaba, respetando sus opiniones y explicándoles la posición del Ejecutivo”.
Añade: “En relación al magisterio, no es necesario extenderse. Es suficiente con señalar que en los casi tres años de gobierno de la Unidad Popular no se registró ninguna huelga de profesores. Un hecho inédito en nuestra historia y que sigue siendo inédito”. (…)
En una conferencia que impartió el 26 de junio de 1989, Aníbal Palma destaca que en ese período “el ministerio de Educación tuvo el porcentaje más alto del Presupuesto Nacional, alcanzando un promedio del 20%. El gasto per cápita en el rubro educacional durante el mandato de Allende subió a US$54,08, el más alto en la historia de Chile”. (…)
Un documento que estremece es la carta que Palma envío desde el exilio en Alemania al diario “La Tercera” en agosto de 1978 para referirse a declaraciones del ex senador Julio Durán, con el cual había sido correligionario en el Partido Radical, para separarse en 1969 cuando el segundo optó por formar una fracción de derecha denominada “Democracia Radical”. A la fecha de la epístola, Durán era duro partidario de la dictadura.
Había señalado en una entrevista a “La Tercera” lo siguiente: “Hoy vino a mi oficina una mujercita de Temuco que anda con su marido desaparecido, un señor Lobos, me parece. Bueno, el señor Lobos fue detenido en Temuco, lo pelaron ‘a guata’ y después lo dejaron en libertad, desde entonces está desaparecido. Yo no sé si se habrá ido con una ‘peuca’ o está escondido, o desapareció efectivamente”.
Palma le representa con evidente indignación que ese “señor Lobos” era diputado del PR, Gastón Lobos, electo por la provincia de Cautín en las elecciones parlamentarias de marzo de 1973. Y le indica: “Mi amigo y correligionario Gastón Lobos fue detenido en Temuco, por los militares sublevados el 11 de septiembre de 1973. Fue salvajemente torturado y sus aprehensores lo pasearon desnudo por las calles, con una metralleta entre las manos, por cierto sin municiones, y con la cabeza afeitada. Esa es la última vez que se le ha visto. Nunca más se supo de él. A su esposa le dijeron que su marido había sido puesto en libertad. Nadie, sin embargo, lo ha visto jamás. Lobos está desaparecido como otros miles de campesinos, trabajadores y profesionales de nuestro castigado país”.
/Nota con información del periodista Pablo Danton, Comunicaciones Utem.